Esta gran mini serie es la gran prueba de que
las grandes historias de amor nunca terminan, siempre están ahí. Por ello
estará siempre en el inconsciente colectivo el gran amor de Escarlata y Rhett,
y por ello cuando en 1994 se estreno esta serie fue todo un bom mundial.
Todo empezó cuando e 1991 Alexandra Ripley
publica la novela “Scarlett” que pronto se convierte en un best seller por
constituir la continuación oficial de “Lo que el viento se llevó” con el
beneplácito de los herederos de Margaret Mitchel. Todos querían los derechos.
Hasta que finalmente la productora pagó por ellos 9 millones de dólares. La
mayor cantidad de dinero que se ha pagado jamás por los derechos de un libro.
Y desde el primer momento que se conoció la
noticia de su adaptación y debido al interés mundial que esto generó, no ha
habido hasta la fecha otro drama televisivo que haya generado esta emoción en
el mundo.
“Scarlett” tiene menos de ese carácter bélico
e histórico que tiene “Lo que el viento se llevó” y se trata más bien de una
historia más personal, de un viaje emocional y sobre las prioridades vitales de
una mujer. Por ello no se debe comparar con la película “Lo que el viento se
llevó” porque ambas concurren por caminos distintos. Esta no trata de imitar ni
de copiar, tan solo es la oportunidad de continuar una leyenda, un amor
inmortal. Es la historia de la persecución de Scarlett por el amor. Una mujer
que vive según sus propias reglas.
La serie se rodó en tres países. El momento
más esperado fue la filmación del regreso de Scarlett a la casa familiar, a
Tara. Para ello se hizo un replica perfecta a partir de los bocetos originales.
Una casa que se deteriorada como un símbolo de que muchas heridas aún no han
cicatrizado.
En Charleston se rodaron la mayoría de las
localizaciones de exteriores, junto con las bellas localizaciones que se
rodaron en Irlanda. Para el departamento de arte esta serie constituyó un
verdadero reto nunca hecho. En total se rodaron en 167 exteriores distintos.
Como también fue un reto para el departamento de vestuario, cuidados hasta el
último detalle. El personaje de Scarlett cambia de vestido unas 120 veces, y
cada uno de esos vestidos reflejan algo de la personalidad y el carácter de la
protagonista: su capricho, su frivolidad, su fortaleza, su humildad, su
espíritu de lucha…
Como también los decorados: el mercado, la
plantación, los edificios y por supuesto las recreaciones de lugares que en “Lo
que el viento se llevó” fueron importantes, como las escaleras de la casa de
Atlanta donde Scarlett y Rhett comenzaron su matrimonio fallido.
Un gran mérito de esta serie fue el gran
casting que se hizo en todo el mundo para elegir a los míticos personajes de
esta gran historia universal. Joanne Whalley hace un trabajo fantástico, en muchos de sus
gestos y movimientos se transmite esa frivolidad del personaje de Scarlett que
también transmitía Vivian Leight. Y para
Rhett se eligió a Timothy Dalton en este
uno de sus mejores trabajos. Sin copiar, porque es imposible, a Clark Gable,
logra transmitir esa ironía en su mirada y ese aire burletero del personaje. La
serie cuenta con secundarios de lujo como John para el John Gielgud, el arrogante abuelo de Scarlett. O de
una de las actrices fetiches del directo, Ann –Margret en el papel de Bell, la
famosa madam del burdel y la única mujer en la que Rhett confía de verdad. Y por supuesto destacar al
personaje de Asley, donde aquí se le retrata con bigote como originalmente así
lo describía Margaret Michel en su novela, y con el pelo ondulado en homenaje a
Leslie Howard. Y también a la gran actriz Julie Harris como la madre de Rhett.
El viraje
dramático de esta película comienza con una tormenta en la que se ven envueltos
Reth y Scarlett mientras navegaban en un bote. Tendrá lugar entre ellos una
circunstancia que cambiará sus vidas y Scarlett decide refugiarse en la tierra
de su familia paterna, Irlanda. En esta serie Irlanda representa la búsqueda de
una nueva vida siguiendo las huellas de su padre.
Se recrea muy bien el conflicto entre los
campesinos y los terratenientes ingleses, reflejo de un conflicto histórico en
la que Scarlett se verá salpicada. En
Irlanda Scarlett conocerá el verdadero concepto de amor de familia en toda su
familia paterna. Allí recibirá mucho amor y será como todo un proceso de
maduración de chiquilla frívola a mujer.
Va madurando, resulta más tierna, pero sin perder su característica
ironía y elegancia.
Gran merito de la serie es el villano Lord
Fenton, interpretado portentosamente por Sean Bean. Un personaje oscuro y
siniestro, pero atractivo y educado a la vez. Una especie de dr Jekyll y mr Hyde . En esta etapa de la
historia de contó con actrices irlandesas que dotan a la historia de una
verosimilitud muy lograda, como los personajes de la señora Frick Patrick o de
Mery Boy.
Una escena que me impactó mucho por su
espectacularidad y su terror es la que acontece en la noche de todos los Santos
cuando Scarlett va a dar a luz y le practican una cesárea siguiendo unos
antiguos ritos célticos. Se contó para ello con el asesoramiento de un “bruja”
conocedora de estos rituales antiguos. Y la escena es totalmente sobrecogedora.
También son espectaculares las bellas
escenas que tienen lugar en marcos incomparables como el castillo de Dublín,
las fincas, las ruinas de la originaria Tara de Irlanda o las de la cacería del
zorro.
Y por supuesto destacar la poderosa banda sonora que compuso John Morris. Tenía un gran reto de hacer una hermosa partitura sabiendo que no podía competir con la de Max Stainer. Y sin entrar en comparaciones, logro una música muy especial que da un acarter propia a esta nueva Scarlett. Tambien unas partituras adaptadas a cada situación y lugar, como las referidas a su estancia en Irlanda o el tema referido cuando descubren las ruinas de la primera Tara. Es como una especie de nuevo tema de Tara grandioso y muy hermoso. Y también se hizo una llamada "Love hurts" interpretada por la the Munich Philarmonic Orchestra y cantada por Nazareth.Un hermoso tema romantico con mucha fuerza.
En definitiva Scarlett es la historia de la
transformación de una mujer, de un viaje interior y exterior. Una mujer que
aprenderá a ser comprensiva y a saber reparar las consciencias de sus
acciones. Todo un proceso de maduración
en el que Scarlett aprenderá el valor de ser una persona auténtica y el significado de las palabras: respeto,
cariño y amor.
John Erman pone toda la carne en el asador
con esta su gran obra, todo un meticuloso trabajo para dar vida a otro tiempo,
a otra cultura, a las tradiciones irlandesas… Dar vida a los restos de una
nueva civilización que el viento dejó.
Scarlett es una poderosa aventura romántica
que hay que ver sin prejuicios ni afanes comparativos. Es la historia de amor
más memorable de una mujer.
Se hizo una gran campaña de publicidad en España para su estreno en televisión que siempre se me ha quedado marcada como uno de mis recuerdos más entrañables de mi infancia por la grandiosidad del proyecto y como se presentaba: la músia, las imagenes...Todo tenía como una magia especial. Era como un clásico que volvía. Me enamoré de Scarlett. Recorté todos los hermosos carteles que salian en las revistas para publicitarla.
Recuerdo esos paseos con mi madre por la calle Triana y como quedé fascinado cuando entramos al desaparecido centro comercial Cardona y en una mesa hacia cientos de libros de Scarlett. Estaban los grandes de tapa dura, edición de lujo, y luego estaban las culumnas de las ediciones de bolsillos. Todos tenian el fascitante cartel de la serie de televisión como portada. Convencí a mi madre para que me comprase la edición de bolsillo, porque la otra valia muy cara. Muchos años más tarde, ya cuando mi madre se fue... conseguí en una tienda de libros de segunda mano aquella edición de tapa dura que era la cara. Recuerdos.
Mi primera visión de la serie, siendo un niño, evidentemente no fue la misma que las otras veces que la he visto siendo adulto. Porque no entendia muchas cosas y se me escapaban cosas de la trama o enlaces con "Lo que el viento se llevó" que tampoco entendía. Pero a pesar de ello, era una serie me atrapada por ese aire de miticidad, de leyenda, de acontecimiento televisivo, de estar viendo algo histórico.
Fue Antena 3 la que tenia los derechos y por tanto la que hizo un despliegue maravilloso de trailes, anuncios, spots... Algunos de ellos los han recuperado en youtube y son como una máquina del tiempo de aquella época entrañable. El estreno fue el 19 de noviembre de 1994, un jueves. Y cada jueves ponían un capítulo. En futuras reposiciones la pusieron en un solo fin de semana, todo un maratón.
Y una vez que ya la serie se emitió por televisión y pasado un tiempo, una tarde paseando con mi madre por Triana, entramos a una de las mejores tiendas que se llamaba Bazar Nueva York, que era toda una delicia; vendian películas, cd, juguetes, artículos de regalos... Y ese día vi una gran columna de packs de vhs de Scarlett. Quedé fascinado por aquella joya, eran 4 vhs envueltos en una caja con el hermoso cartel de la película. Por fin podía tener la serie Scarlett a mi disposición y verla cuando quisiera. Pero no, al menos no ese día. Valía muy cara. Por aquél entonces ese pack creo que costaba 5.995 pesetas. Demasiado dinero para unas películas al menos para mi madre en aquellos años. Viviamos solo de un sueldo y no nos lo podiamos permitir. Pero yo en mi ignorancia de niño me comporté como un caprichoso llorando y suplicándole que me lo comprara. Estuve por toda la calle Triana llorando y supliacándole. Mi podre madre...menuda paciencia. Pero eso día el dinero fue para el supermercado como es logico. Aquél supermercado que se encontraba en una de las boca calles de Triana, antes era un Cruz Mayor y hoy es un HiperDino.Y menuda perreta de llorera cogi mientras ella compraba.
No fue hasta un tiempo después en que mi madre al fin pudo comprármelas y aún las tengo como oro en paño, como uno de mis mejores recuerdos de mi infancia cinéfila. Así como también el libro de bolsillo que me compró en Cardona. Yo creo que quizá es por eso el cariño con el que hablo de esta serie, continuación de "Lo que el viento se llevó", por ser una parte de mi infancia que pude ver con mi madre. Y hoy, cuando ella ya no esta, todo eso en mi memoria se engrandece porque forma parte de un tiempo feliz que nunca más volverá...